TU ENERGÍA HABLA, ¿SABES QUÉ DICE?

Por - 07:30

Tu energía habla y dice más de lo que imaginas
Tu Energía Habla y Dice Mucho
¿Crees en la energía?

No sé si eres de las personas que creen en la energía que transmiten o reciben de otras. Yo sí.

Pienso que todas las personas tenemos una energía que habla, que es capaz de contar a los demás quiénes somos, cómo pensamos o qué sentimos.

Nosotros también podemos percibirla, como cuando algo nos dice que alguien no nos conviene y no hacemos caso, pero al final nos arrepentimos.

Del mismo modo, pienso que hay gente más sensible a las energías que otra. Pero esto no quita que en todo momento nuestra energía cuente algo, porque la energía habla. Y no solo eso, también mueve, impulsa y transforma.

No se puede ocultar.

¿No te ha pasado que conoces a una persona (por casualidad o causalidad) y el hecho de conocerla hace que algo se mueva o se transforme en ti, para bien o para mal?

Muchas veces, la energía se manifiesta en cosas tan sutiles como la sonrisa, el tono o volumen de la voz.

Los hay que masterizan la ocultación de su verdadero yo, aunque en la mayoría de los casos, es algo que no se puede ocultar. Y tanto que, cuando finges, también lo transmites. No es fácil actuar contra quien alguien es.

Conductora memorable.

Recuerdo que en mi etapa universitaria tuve un año en el que cogía el bus con regularidad. Lo normal era que me cruzara con diferentes conductores a lo largo de los meses, sin embargo, para mí es memorable una conductora.

Siempre que me encontraba con ella sabía que tendría un buen día. Si me encontraba con ella al final de mi día, sabía que solo podía terminar mejor.

Era el tipo de persona que te mejoraba el humor. Y es curioso, porque al subir al autobús, solo dispones de unos segundos para cruzar unas palabras con quien conduce.

Ojito con esta gente.

Lo que nunca le faltaba a esa conductora era una sonrisa. Deduje que debía amar su trabajo o que era una persona alegre. A lo largo de mi vida he conocido a gente así en diferentes sectores.

Incluso los que transmiten alegría trabajando en un puesto que tú no considerarías el mejor del mundo. Y esto es algo que siempre me ha llamado la atención.

Pero tal vez porque también he conocido a muchos que odian su trabajo y su vida, gente que te contagia su visión pesimista de todo y ni te das cuenta, porque pasan el día quejándose de los otros, pero no mueven un dedo para no tener que hacerlo.

Son esos que se quejan del jefe u otros compañeros, pero a la primera que aparecen, se comportan como si fueran sus mejores amigos o las personas que más admiran.

No sé tú, pero a mí esta gente no me inspira confianza. Gente que te abraza a veces y en cuanto te das la vuelta, te mata con sus palabras. Ojito con estas personas.

Esto va de energías.

Esto va de energías. Los dos casos que he nombrado me suelen transmitir cosas diferentes. Como una persona externa, la conductora era capaz de ponerme de buen humor y alegrarme el día solo con su sonrisa y su forma agradable de tratar a las personas.

Como he mencionado, transmitía que amaba su trabajo o que era una persona alegre. En el segundo caso, trabajar en esas condiciones solo me podía transmitir mala energía, mala vibra como dirían algunos. Y, desafortunadamente, es algo muy extendido.

Pienso que es un germen letal para las personas y organizaciones. Son muy afortunadas las personas, empresas u organizaciones que se libran de gente así. Aunque es complicado no encontrar, como mínimo, a un virus de esos en alguna parte.

Pero tener tan solo uno es correr un gran peligro, su energía es altamente destructiva y capaz de contaminar lo sano poco a poco. Su energía habla y el lenguaje que habla no gusta. Es un lenguaje que a mí no me gusta.

🌹Lees Voces en Vela🌹

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