¿CÓMO TENER MÁS CONFIANZA Y SEGURIDAD EN TI?

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La frágil confianza.

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La confianza se ajusta a ese grupo de cosas difíciles de construir y fáciles de romper. Es decir, cuando no confías en ti o cuando confías muy poco en ti, te puede ser difícil empezar a ser una persona de confianza robusta. Y pese al trabajo que supone construir y aumentar tu confianza, un infortunio puede hacer que se desinfle como un globo.

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Como casi todo lo que nos afecta en la vida, la confianza es algo que se puede trabajar. De hecho, leí en algún libro alguna vez, que incluso las personas que pensamos que tienen la vida resuelta, que son seguras, también tienen sus momentos de dudas. 


Tienen sus miedos e inseguridades. Para que veas que es algo que no solo afecta a unos pocos. La diferencia principal reside en que algunos trabajan más su confianza y otros se quedan estancados y atrapados en sus miedos.


En este post quiero compartir contigo algunas claves que te pueden ayudar a construir o robustecer tu confianza. Algunas que me han servido a mí misma y que creo que te pueden servir a ti.


-Determinación.


Muchas veces veo tips de cómo hacer o ser esto y aquello. Si te fijas bien, ningún tip en sí mismo hará milagros si no tomas la determinación de cumplir, si no tienes la voluntad de mejorar. 


Si quieres ser una persona más confiada, tienes que comprometerte con tu proceso de mejora. Tienes que tener la determinación de cumplir y tomar las acciones necesarias. Ese es el mayor de los secretos o milagros, lo puedes llamar como quieras.


-Rodearse de buena gente.


Muchos de los problemas que tenemos surgen a raíz de las personas de las que nos rodeamos. Los problemas de confianza también. Si te rodeas de gente que te hace sentir que no vales, que no eres suficiente y no mereces que te pasen cosas buenas, le estás haciendo un flaco favor a tu vida. 


Las personas son capaces de sacar lo mejor y lo peor de ti. Júntate con los que sacan lo mejor de ti. Identifica y aléjate de los que te mantienen en el fango. Será fácil identificarlos porque cuando estás con ellos, tu propio cuerpo te lo dice. Te sientes mal y lo sabes. Libérate ya.


-Coherencia interna y externa.


No importa si tienes mucho o poco, pero lo que tienes, debe reflejar lo que quieres sentir. Por ejemplo, al escoger tu vestuario, elige o compra prendas que te hagan sentir seguro y confiado cuando las llevas.


En mi caso, las ropas, con independencia de lo bonitas y elegantes que se vean para los demás, primero me tienen que hacer sentir cómoda. Cuando me siento cómoda con lo que llevo me siento más confiada. Podrías probar y descubrir qué cosas incrementan tu coherencia interna y externa. Puede ser algo tan sencillo como mantener limpio y ordenado tu entorno también.


-Saber y conocer.


Nada crea tanta inseguridad como el desconocimiento. Saber cómo funcionan las cosas, el mundo o, por ejemplo, qué se espera de nosotros en el lugar de trabajo, son algunas cosas que ayudan a robustecer la confianza. Por eso, cuando no entiendes algo tienes que preguntar.


A veces da vergüenza, pero es peor agravar las cosas por no haber preguntado. Es mejor hacerlo lo mejor que puedes porque dispones de la información correcta. ¿Cómo puedes hacer un gran trabajo si no sabes qué trabajo tienes que hacer o qué resultados se esperan de ti? Pregunta, aprende, practica.


-Trátate bien.


Muchas veces, nosotros mismos somos nuestros peores enemigos y nos tratamos con severidad. Cuando alguien que quieres te hace algo malo, casi siempre buscas la manera de perdonar. Cuando se trata de ti no puede ser diferente. 


Por eso tienes que quererte lo suficiente para perdonarte cuando cometes un error o cuando las cosas no salen como te gustaría. Eres humano y no puedes hacer todo perfecto. Todos cometemos errores alguna vez, tú también. Quiérete, perdonate, aprende y sigue adelante.


-Relájate.


Esto supone dejar de perseguir, dejar de esperar ser una persona totalmente confiada. Como te he adelantado, incluso las personas que admiras por sus éxitos tienen aspectos que les hacen sentirse inseguras. 


El truco está en hacer las cosas a pesar de todo, intentar disfrutar del camino, relajarse y no imponerse la idea de ser perfecto. Las personas correctas verán tus sombras pero sabrán apreciar tus luces. Así que solo relájate y vive. 


-Cree en ti.


Normalmente, lo que tenemos dentro es lo que se manifiesta fuera. Aprende a creer en ti, en tus decisiones, capacidades y habilidades. 


Está muy visto y dicho, lo sé. Pero funciona. Tal vez has estado en un entorno donde te han hecho sentir y creer que todo lo que haces está mal, que no mereces el amor de nadie y lo que tienes que decir no es importante. 


Debes saber a partir de hoy que todos, absolutamente todos tenemos algún don, algo bueno que ofrecer. Si puedes leer este post seguro que también puedes encontrar eso que te hace especial para bien. Todos tenemos defectos y, casi siempre, son más complicados de cambiar, así que empieza a trabajar más en tus virtudes. Cree más en ti. Solo hace falta voluntad. 

🌹Lees Voces en Vela🌹

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